Desmontando mitos: Los ETF se están comiendo el mundo, @NicolasRabener
Ahora que tan de moda está la comparación de los fondos cotizados con la indexación directa viene bien repasar esta pieza publicada en @FactorResearch y que forma parte de la serie "desmontando mitos" que publican recurrentemente. De la misma manera que Marc Anderssen dijo en 2011 aquello de "El software se está comiendo el mundo", si el consejero delegado de BlackRock, Larry Fink, hubiera hecho comentarios similares sobre los fondos cotizados (ETF) hace 11 años, también parecería premonitorio hoy.
Pero a pesar de su fenomenal crecimiento en la última década, no todo es bueno en el país de los ETF:
"La gestión activa ha fracasado. Basta con comprar el índice a través de un ETF". Ese fue el argumento inicial del ETF. Y funcionó - para un puñado de ETFs que siguen el S&P 500 y otros índices importantes. Pero Wall Street es una máquina de vender y, en consecuencia, lanzó miles de productos ETF. Los inversores se alejaron del primer y más valioso caso de uso del ETF. Al fin y al cabo, la cartera óptima para la mayoría de los inversores es una cartera anodina compuesta por un par de índices de acciones y bonos.
Hoy en día, hay más de 2.000 ETFs centrados en la renta variable en EE.UU. y sólo unos 3.000 valores estadounidenses. Estos ETFs cubren todas las estrategias imaginables y son casi todos apuestas activas.
Sin duda, esto no es lo que pretendían los creadores de los ETF.

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